Recientemente, el gobierno brasileño introdujo nuevas regulaciones para introducir un nuevo mecanismo de fijación de precios para los precios de la electricidad fotovoltaica distribuida del país. La nueva normativa entrará en vigor en 2023. De acuerdo con la nueva normativa, los sistemas fotovoltaicos distribuidos con una capacidad instalada inferior a 5.000 kilovatios en Brasil utilizarán "tarifas de medición neta" hasta 2045.
Rodrigo Sauaia, presidente ejecutivo de la Asociación Brasileña de Energía Solar, dijo que las nuevas regulaciones fortalecen la regulación de Brasil de los sistemas fotovoltaicos distribuidos y la estabilidad de la implementación de políticas. "En el futuro, la proporción de generación distribuida en la generación de energía total de Brasil será cada vez mayor, y gradualmente superará la generación de energía de los sistemas fotovoltaicos a gran escala". En la actualidad, la capacidad instalada total de generación de energía fotovoltaica conectada a la red en Brasil es de 13 millones de kilovatios. , de los cuales, la capacidad instalada de fotovoltaica distribuida ha alcanzado los 8,4 millones de kilovatios.
Se espera que Brasil agregue más de 11,9 GW de capacidad fotovoltaica instalada en 2022. Según la evaluación, la inversión privada en la industria fotovoltaica brasileña podría superar los BRL 50,8 mil millones (~$9,85 mil millones) para 2022, incluidos los sistemas fotovoltaicos pequeños y medianos ( instalados en cubiertas, fachadas de edificios y suelo) y sistemas fotovoltaicos a gran escala ( grandes parques fotovoltaicos ). Según el análisis, Brasil desplegará sistemas fotovoltaicos con una capacidad instalada de más de 11,9GW en 2022.
La Corporación de Pesquisa Energética (EPE), subsidiaria del Ministerio de Energía y Minas de Brasil, publica cada año el Plan Decenal de Expansión Energética, aclarando las metas de transformación y desarrollo de la estructura energética a mediano y largo plazo. Para 2030, la demanda de electricidad de Brasil aumentará de 546 TWh en 2019 a 763 TWh, con un aumento anual promedio de alrededor del 3 %, las líneas de transmisión aumentarán de 162 700 kilómetros a alrededor de 200 000 kilómetros, y la capacidad de potencia instalada total del país alcanzará los 224,3 GW, de que concentró La capacidad fotovoltaica instalada aumentará de 3,1 GW a 8,4 GW. Además, el gobierno planea atraer más de 300 mil millones de reales de inversión entre 2020 y 2030 para la construcción de puntos de energía, de los cuales las nuevas inversiones en energía eólica y fotovoltaica representan más del 50%.